Se acerca la época de buen tiempo, el verano… y cada vez hacemos más comidas al aire libre.
Por eso hoy os traemos unos consejos sobre cómo limpiar y cuidar tu barbacoa y hacer que dure mucho más tiempo.
Nuestras recomendaciones :
- Limpieza de la ceniza después de haber cocinado en ella
Para limpiar la ceniza es recomendable tener un cepillo o la clásica escobilla de caña a mano. Espera siempre que estén totalmente apagadas para recogerlas. Evita siempre que puedas el agua mientras estés limpiando la ceniza, ya que al mojarla la ceniza puede convertirse en un montón de barro que resultará mucho más difícil de limpiar.
- Limpieza de la parrilla
Las parrillas siempre deben estar limpias ya que son una parte esencial de tu barbacoa.
Distinguimos entre las barbacoas a las que se le puede retirar la parrilla, por lo que puedes llevarla a un fregadero y utilizar lavavajillas y estropajo. Eso sí procura que estén frías.
Para aquellas parrillas que no puedan quitarse de la barbacoa haremos lo siguiente: en primer lugar retirar la ceniza, como ya hemos comentado, después toma un recipiente y echa bicarbonato y agua, para más tarde limpiar con un cepillo y ese líquido tu barbacoa.
- Cuidar cada parte de la barbacoa
No es igual limpiar la parrilla que el lateral de tu barbacoa, por eso cada parte debe limpiarse de una manera diferente, por ejemplo las piezas de plástico con agua, jabón y una balleta. Las porcelánicas con multiusos, las superficies pintadas con lavavajillas y un paño y por último las piezas de acero inoxidable con un limpiador de acero inoxidable. Así nos aseguraremos de que cada pieza dure mucho más en su puesto.
- Realizar labores de mantenimiento en profundidad
Es recomendable que al inicio o al final de temporada o en ambas ocasiones realicemos una limpieza a fondo. Así nos aseguraremos de que el polvo que haya podido coger la barbacoa desaparezca, y para dejar la barbacoa inactiva totalmente limpia para que no se estropee en épocas de desuso.
